Increíble lugar para relajarse y disfrutar de las vistas y la gastronomía! Actividades organizadas y atención personalizada.

funcionarios discretos y muy buenos, hicieron algunas recomendaciones muy buenas. me han encantado el hotel y su decoración sencilla. todos los servicios me parecieron agradables.

Me encantó la decoración del hotel, especialmente en las áreas comunes. Todo era muy colorido y vibrante, lo cual le daba un ambiente muy alegre y acogedor. Además, el hotel estaba muy bien adaptado para personas mayores como yo. Había rampas y pasillos amplios que facilitaban el movimiento con silla de ruedas o bastón. También había asientos cómodos en todas partes para descansar cuando lo necesitaba.

Lo único que me hubiera gustado es que el hotel ofreciera más actividades orientadas a personas mayores. Por ejemplo, paseos tranquilos por la playa o clases de yoga suave.

Siempre vuelvo a este hotel porque el personal amable me dio recomendaciones para llevar comida la primera vez que me hospedé. Además, tiene todas las comodidades que necesito, como acceso a la playa, piscina al aire libre, Wi-Fi gratuito. Vuelvo pronto para unas vacaciones.

el lugar es espectacular, con vistas impresionantes del mar y un ambiente tranquilo y relajante. Los desayunos están bien organizados y deliciosos, y el personal es amable y servicial. Las actividades y excursiones que ofrecen son emocionantes y la comida en el restaurante es de alta calidad.

falta de servicio de yoga

La habitación que teníamos era lo suficientemente espaciosa y súper limpia y contaba con toallas limpias, aire acondicionado, un jacuzzi. El personal y el director fueron todos absolutamente agradables. Tenía una ubicación en primera línea de playa en el arrecife. Además, estaba en las proximidades de la orilla, de los hermosos jardines y de la playa.

La ubicación justo al lado del mar es espectacular. Las vistas son las mejores que he visto, con pescadores, barcos y niños jugando en la playa. Además, desde la piscina se pueden ver los monos típicos de la isla. La limpieza del hotel también es destacable, todo estaba muy bien cuidado.

Nada malo.

El tiempo que pasé en Karamba Eco Boutique fue increíble. Obtuvimos un gran valor por nuestro dinero y la habitación era estupenda. La ubicación era perfecta, con hermosas vistas al mar y un ambiente tranquilo y relajante. El personal fue extremadamente amable y servicial, siempre con una sonrisa en el rostro. Definitivamente recomendaría este lugar.

La selección de desayunos podría mejorar.

unas vacaciones familiares inmejorables. El personal amable y atento, siempre con una sonrisa. Las habitaciones con vistas al mar y una ducha al aire libre que es una gozada. La comida espectacular, nunca pensé comer tan bien en este lugar lejano. El hotel se encarga de todo, desde excursiones hasta transporte. Una experiencia muy recomendable.

seguridad deficiente. intentaron robar en nuestra habitación mientras dormíamos.

Ubicación en primera línea de playa justo en la playa con vistas estupendas. Muy cerca del mar, también de del acantilado. La habitación es sorprendentemente nueva y muy bien amueblada y la cama grande. Había un baño increíble con una ducha a ras de suelo y toallas.

Una habitación súper limpia con con baño privado y una cama grande. Ubicación no muy lejos de un restaurante y de un acantilado y también del hermoso jardín. Está a solo 1 km de Kizimkazi Beach.

Habitaciones encantadoras y románticas e impecables, con vistas excepcionales, y una zona de estar, una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico. Todo el personal era complaciente, resolvió mis problemas. Una cama perfecta y una ubicación buena y magnífica en una playa. También estaba muy cerca de un restaurante y del hermoso jardín y del acantilado.

Me encantó la ubicación frente al mar y las hermosas vistas al atardecer desde todas las habitaciones. La ducha al aire libre fue una experiencia increíble. El hotel nos facilitó la contratación de excursiones y transporte con mucha facilidad. La comida en el restaurante de Miquel fue espectacular. Destaco la amabilidad y la sonrisa siempre presente del personal. Recomiendo la excursión al banco de arena y los manglares en el barco de vela latina tradicional.

Me sentí bastante seguro, no me puedo quejar.

La ubicación es en primera línea de playa a pocos pasos del océano, del mar y de un taxi. Además, se encuentra a unos pocos minutos de Kizimkazi Old Mosque. Habitaciones muy bien amuebladas que cuentan con aire acondicionado, toallas limpias y una cama doble, personal agradable.

Reservé una habitación encantadora y romántica con una zona de estar, una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico, además era impecable. El personal fue complaciente y acogedor, gracias a ellos todo fue formidable. Una ubicación magnífica en el hermoso jardín y vistas excepcionales. Y cerca de jardines hermosos y de un restaurante y de una hermosa playa.